El masaje es una manera de establecer un vínculo especial con tu bebé y de transmitirle seguridad. Pero va mucho más allá, con él lo ayudas a regular su sistema digestivo, estimulas su sistema nerviosos y refuerzas el inmunológico. Dibujando paso a paso su cuerpo, contribuyes también a que pueda “sentirse” e integrar así su esquema corporal. El suave y relajante masaje “Dulces Sueños” con el aceite Love Eternal de Little Butterfly se realiza con movimientos neuro-sedantes que además contribuyen a relajar sus inexpertos musculitos.
– Empieza colocando a tu bebé boca arriba en un lugar cómodo, estable y con la temperatura adecuada, con o sin pañal, tapándolo con una mantita o toalla. Calienta muy bien entre las manos Love Eternal para liberar todo su poder y deja reposar las palmas de las manos sobre su barriguita y así establecer una conexión cálida inigualable –este paso tendrás que repetirlo en cada zona de su cuerpo-. Cubre para que no le dé frío y empieza.
– Es el momento de pasar a las piernas:
• Reposa las palmas de las manos en las plantas de sus pies unos segundos y después desliza ambas manos por las piernas hacia arriba.
• Masajea cada pierna, primero una y luego otra, para relajar sus músculos.
• Dibuja con tus pulgares círculos en la planta de cada uno de los pies.
• Mueve suavemente sus piececitos de un lado a otro junto con los deditos.
• Por último desliza las manos desde los pies, pasando por las piernas y la tripa hasta hombros.
– Después pasa a la barriguita y desliza las palmas de las manos de manera alterna hacia abajo para calmar y movilizar la barriguita que se congestiona muy fácilmente.
– En los hombros masajea con las yemas de los dedos deslizando suavemente hasta llegar a las manos. Después céntrate en los brazos masajeándolos suavemente, primero uno y luego otro.
– A continuación coloca a tu pequeño boca abajo para centrar todos tus cuidados en la espalda. Vuelve a calentar muy bien Love Eternal entre las manos y deja reposar las palmas sobre su espalda, ¡sentirá un calorcito increíblemente reconfortante!
• Desliza los pulgares por nalgas, firme pero sin presión, y sube por espalda.
• Realiza pases neuro-sedantes por toda su espalda desde la cabeza hacia el culito deslizando suavemente las manos.
– Viste a tu bebé para que esté listo para dormir antes de continuar con el masaje facial y craneal.
• Deja las palmas de tus manos reposar en su carita unos segundos, casi rozándolo, y deslízalas por el cráneo. ¡Es tremendamente relajante!
• Desliza suavemente las yemas de los pulgares desde el centro de la frente hacia laterales.
• Repite el mismo movimiento pero esta vez desde el centro de la mejillas hacia los laterales.
• Y vuelve a repetir desde la barbilla hacia los laterales.
• Masajea ambas orejitas.
• Para finalizar, suavemente desliza las yemas de los dedos por el cráneo.