Uno de los problemas más habituales de la piel a la vuelta de las vacaciones estivales es que su aspecto se vuelva apagado, sin vitalidad. Es habitual sobre todo en pieles castigadas, especialmente por la continuada exposición solar. Para combatir este problema, en SANTUM apuestan por un tratamiento de recuperación biológica de la piel, un regenerante facial denominado Komorebi. Este permite recuperar la vitalidad y luminosidad de la piel del rostro.
 
“La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y se ve afectada por múltiples agentes tanto externos (acción solar, cambios de temperatura, etc.) como internos(estrés, mala alimentación). Las células de la piel se regeneran de forma natural pero, con el paso del tiempo, la regeneración es más lenta y menos eficaz. Además de seguir una rutina adecuada para cuidar nuestra piel (dormir bien, beber agua y llevar una alimentación saludable), podemos recurrir a tratamientos que nos ayuden a regenerar la piel”, afirma Daniel Marín, cosmetólogo y director de SANTUM.
 

¿Qué se consigue?

 
El tratamiento regenerante facial de recuperación biológica de la piel es específico para restablecer y lograr un equilibrio en la fisiología de la piel. Consigue regenerar la barrera de protección natural y su manto hidrolipídico activando el sistema inmunológico y elevando los niveles de tolerancia frente a los agentes externos (polución, cambios climáticos, estrés y tabaquismo, entre otros).
 
Este tratamiento es perfecto para aquellas personas que buscan lucir una piel suave y luminosa. Sus efectos son rápidos y prolongados y no tiene efectos secundarios. Es indoloro.
 
Duración: 60 minutos
PVP: 95 €