Ana Boyer está pletórica. Desde que, hace un tiempo deciera hacer un parón profesional para dedicarse a acompañar a su novio, Fernando Verdasco, en sus compromisos profesionales por todo el mundo, la menor de las hijas de Isabel Preysler está disfrutando de una de las mejores etapas de su vida. Así lo reflejan las instantáneas que suele compartir en las redes sociales.

Estos días, Ana, de 27 años y Fernando, de 32, han escogido las espectaculares playas de arena blanca de Los Cabos, en el pacífico mexicano, para pasar sus vacaciones. Un destino paradisiaco que se ha convertido en el lugar de veraneo favorito de estrellas, como Georfe Clooney o Jessica Alba. No son las vacaciones el único motivo por el que han viajado allí, pues, tras unos días de descanso, el tenista madrileño comenzó su participación en la primera edición del Abierto Mexicano de Tenis, junto a compatriotas como Feliciano López.

Antes de comenzar el torneo, la pareja ha disfrutado de juegos en el mar y paseos por la orilla de la playa playa del lujoso hotel de cinco estrellas, con spa, campo de golf, cinco piscinas y gran variedad de restaurantes, en el que se alojaban. Momentos que la propia Ana quiso compartir con sus seguidores en forma de bonitas imágenes.

Ana Boyer y Verdasco

La joven abogada y el tenista han disfrutado de unas paradisiacas vacaciones en el pacífico mexicano.

Ana Boyer 2

A sus 27 años, Ana ha decidido tomarse una temporada sabática para acompañar a su chico en sus compromisos profesionales.

No hay boda a la vista

Hace solo unos días, Ana y Fernando volvieron a acaparar la actualidad del corazón cuando se rumoreó que habían decidido convertirse en marido y mujer y ya estaban preparando el enlace. Una información que ellos no dudaron en desmentir. “Para contestar las preguntas que nos están haciendo al respecto, queremos aclarar que la noticia sobre nuestra boda es falsa. ¡Gracias!”, publicaron en sus respectivos perfiles de las redes sociales. 

Aunque de momento no se plantean el darse el “sí quiero”, lo que está claro es que la pareja vive su mejor momento. En octubre del 2015, tras celebrar su segundo aniversario, los novios decidieron iniciar su vida juntos y mudándose a un espectacular ático con piscina privada, en una de las zonas más exclusivas de Madrid. Pronto celebrarán sus tres años juntos y siguen igual de enamorados que el primer día.