El positivo en el test del embarazo resulta a veces toda una sorpresa. El bebé, buscado o no, con pan bajo el brazo o sin él, se anuncia cuando menos se le espera. Entre esas rayitas rosas que aparecen en los aparatos predictores  (o esa carita feliz, si son digitales) y el nacimiento, quedan apenas nueve meses en los que a la madre apenas le da tiempo a enterarse del  gran cambio que se avecina.

En el otro extremo, el terrible  diagnóstico que la infertilidad supone para muchas mujeres y parejas resulta todo un calvario hasta que deciden ponerse en manos de los tratamientos de reproducción asistida. Aun en este caso, tratando de conseguir el embarazo con ayuda profesional, son muchos los nervios, la ansiedad y las dificultades emocionales desde que reciben el ansiado positivo hasta que pueden tener al niño en sus brazos.

En uno y otro lado ,y salvo futuras mamás previsoras, el primer embarazo es una gran incógnita. ¿Qué pasará ahora? ¿Cómo debo comportarme? ¿Debo cambiar de vida? Preguntas y preguntas de ámbito general a las que hemos tratado de responder, con los expertos de Clínicas EVA.

Hay que ponerse manos a la obra antes de confirmar la buena noticia, explican desde estos centros de fertilidad. Es decir, no se deben modificar los hábitos e introducir una alimentación más saludable y ciertos controles médicos cuando ya se esté encinta, sino meses antes. De esta forma, no tendrás que cambiar de forma brusca tus rutinas cuando la cigüeña comience su viaje. Lo irás haciendo poco a poco, en aras de un embarazo saludable y de una futura salud óptima para el bebé.

Clínicas EVA nos dejan estos 10 consejos para afrontar la maternidad en buena forma:

1. Ponte al día con tus visitas ginecológicas. Aunque parezca mentira, a veces se descuidan, incluyendo también las revisiones anuales o bianuales, según el caso, de la mama. 

 2. Adiós a los hábitos tóxicos. Fuera alcohol y, por supuesto, tabaco. Pide ayuda para dejarlo. No es fácil, y la ansiedad que produce la deshabituación a la nicotina es también perjudicial para el feto. Si lo logras antes de quedarte embarazada, habrás pasado lo peor.

3.  Revisa tu cartilla de vacunas infantil y, si no la tienes, pregunta a tus mayores. Ante la duda, tu médico te dirá si tienes que vacunarte de la rubeola o la varicela para no poner en peligro a tu bebé.

4.  Fuera estrés. Es una epidemia mundial origen y causa de muchas otras enfermedades. No lo subestimes. Te perjudica a ti y al niño. Ve bajando el ritmo. No olvides que está considerado como de las causas principales de infertilidad.

5.  Controla tu peso.  La dieta saludable ayuda a la fertilidad y, por el contrario, la obesidad sólo contribuirá al sobrepeso en el embarazo y a otros problemas de índole circulatorio y metabólico, entre otros.

6.  Visita al dentista. Tu boca debe estar impecable cuando aparezcan las dos rayitas en el test de embarazo. Recuerda que luego algunos tratamientos dentales deben esperar a que terminen los nueves meses y la lactancia.

7.  Muévete, practica deporte, sin grandes esfuerzos, pero con regularidad.

8.  Comienza a tomar suplementos de ácido fólico. Esta vitamina del grupo B previene problemas graves como la espina bífida o enfermedades cerebrales.

9.  En otro orden, práctico, prepara el nido. Luego vienen las prisas, los nervios y las carreras, nada buenas en los últimos meses.

10. Y, ahorra. Se calcula que durante sus primeros 365 días de vida, tu primer hijo, gastará de la hucha familiar entre 6.000 y 10.000 euros.