Todo ritual de belleza debería comenzar por una buena limpieza. Así es, hay que limpiar la piel a diario con productos adecuados a sus necesidades específicas  antes de pasar al siguiente paso (ya sea la hidratación, la nutrición o la protección). Una piel que no está limpia no se muestra receptiva a ningún cosmético. Si los poros del cutis están taponados y llenos de suciedad no permiten que los principios activos de los cosméticos penetren en ellos, por lo que de nada servirá tener la mejor crema del mercado. ¡No hará efecto!

También es necesario utilizar un exfoliante facial al menos una vez a la semana. Las células muertas se van desprendiendo de la capa externa de la piel de forma natural  y se sitúan en la superficie. Por eso conviene retirarlas y conseguir que los poros estén limpitos y muy receptivos.

Los exfoliantes de Sabon son ideales para conseguir “rematar” cualquier rutina de cuidado facial. Estos cosméticos dejan la piel renovada y ayudan a que los tratamientos cosméticos que se aplican a continuación se absorban mejor.

Esta firma de Cosmética Natural consta de dos referencias irresistibles:  

Exfoliante Facial Sabon (28 € el formato de 200 ml, o 14 € el formato de 75 ml.)

 

 

Exfoliante Facial del Mar Muerto (39 € el formato de 150 ml.)

 

 

La fórmula de estos dos productos ayuda a crear una apariencia fresca y restauran la suavidad, la humedad y la vitalidad de la piel.

Entre sus ingredientes principales destacan:

Granos de Jojoba: son extremadamente delicados y producen una textura más suave que otros ingredientes. Esto permite que el producto realice un peeling eficaz, pero poco agresivo; sin irritar la piel.

Aceite de Lemongrass: un limpiador eficaz en todo tipo de pieles, ideal para conseguir una piel luminosa y uniforme y para estabilizar los niveles de grasa de la piel.

Aceite de menta: tiene efecto calmante y refrescante sobre la piel, lo que ayuda a despertar las pieles cansadas. También es una fuente de vitaminas y minerales. Está indicado para cualquier tipo de piel,  pero es especialmente útil para las grasas y mixtas, ya que acaba con los poros obstruidos.

 

¿Cómo se aplican?

Se aplican sobre la piel húmeda y se realiza un suave masaje con movimientos circulares durante aproximadamente dos minutos. Después, se procede a enjuagar el rostro con agua para retirar el producto.

Se trata de cosméticos tan respetuosos con la piel que se pueden utilizar incluso dos veces por semana.